El pasado 14 de mayo de 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió sobre los efectos a la salud mental que se han presentado a causa de la pandemia global y que van a seguir teniendo consecuencias a futuro con un aumento de suicidios y trastornos psicológicos.
Del mismo modo la OMS insistió a los gobiernos a no dejar de lado a las personas que puedan presentar problemas de este tipo, atendiéndolos con los servicios adecuados.
En la rueda de prensa presentada durante ese mismo día, en palabras de Dévora Kestel la directora del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la OMS se dijo lo siguiente:
“La situación actual, con aislamiento, miedo, incertidumbre y crisis económica, puede causar trastornos psicológicos.”
La OMS ha mencionado que los países deben estudiar las necesidades de todos los sectores y garantizar que el apoyo psicológico está disponible como parte de los servicios esenciales.
También se dio el ejemplo de un estudio en donde se mostraban las cantidades de trabajadores que han sufrido durante este periodo de tiempo en que ha permanecido la pandemia. En Candada, un 45% declaró necesitar ayuda psicológica, mientras que un estudio realizado en China revelo que el 50% sufre de depresión, un 45% de ansiedad y otro 34% por ciento tiene insomnio.
Dévora Kestel, recomienda que los gobiernos consideren el impacto que ha tenido la crisis en la mente de las personas y que actúen con empatía ante esta situación.