¿Te has imaginado a un sacerdote bautizando con una pistola de agua? Pues ahora esto es una realidad, un sacerdote tomó esta medida para prevenir el contagio del COVID-19 y mantener la Sana Distancia.
Las fotografías que ves a continuación fueron tomadas en una capilla de Brownsville, Texas. Esta medida ha desatado una ola de opiniones, hay quienes califican el acto como exagerado y aseguran que lo correcto sería suspender este tipo de eventos.
Pero, en este caso, el padre Timothy Pelc utilizó el juguete de agua para dar la bendición a los feligreses de San Ambrosio en Detroit durante la celebración de la Pascua y evitar así posibles contagios y aglomeraciones.
