Los datos presentados por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) han desmentido lo declarado hace algunos días por el presidente Andrés Manuel López Obrador ya que, pese a que el mandatario federal asegura que las cifras de homicidios dolosos por arma de fuego fueron a la baja durante los primeros ocho meses del presente año, la realidad no es del todo cierta.
De acuerdo a las estadísticas presentadas, el homicidio doloso sí ha tenido una disminución del 24%, esto principalmente por los problemas internos que tienen los cárteles de narcotraficantes asentados en la zona centro del país, quienes se pelean constantemente por la venta de drogas al menudeo, secuestro y extorsión, registrándose así un total de 742 asesinatos hasta agosto del 2019, mientras que en 2020 se tuvieron 562.
Sin embargo, los números muestran que los meses en los que las autoridades ordenaron el confinamiento para evitar más contagios de COVID-19, sirvieron para amortiguar el ritmo de los homicidios dolosos adjudicados principalmente al “ajuste de cuentas” de los grupos delictivos locales; por ejemplo, marzo de 2019 cerró con 11 víctimas, mientras que ese mes, pero de 2020, registró apenas 78.
En abril de 2019 se registraron 92 víctimas, contra 77 del mismo mes de 2020, la problemática siguió en descenso, pues en mayo del año pasado fueron 122 eventos y en éste 73.
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Durante junio de 2019 se reportaron 84 casos y en 2020 fueron 70. Julio del mismo año cerró con la misma cifra, pero este año fueron 64. Sólo en la comparativa de esos meses la disminución en ese delito fue de 18%.
En agosto, y una vez que las autoridades fueron aflojando las medidas preventivas, se registraron 54 homicidios dolosos contra los 58 con los que cerró 2019.
Auguran repunte de la violencia
En ese sentido, Abelardo Pineda, sociólogo por la UAM y especialista en delincuencia organizada, pide a las autoridades no “cantar victoria”, pues si bien se registró una disminución en ese delito, una vez que lo más grave de la pandemia termine, la violencia se puede incrementar.
“Esa confianza que alardean las autoridades es peligrosa (…) Los delincuentes también estuvieron en pandemia (…) Una vez que den luz verde para todo, esas cifras van a repuntar.
“[También subirán] las denuncias de extorsión y secuestro, pues no se ha pagado el derecho de piso porque no han abierto [los negocios], cuando lo hagan, les van exigir el pago y no van a tener, ahí está lo complicado”, dijo.
