La científica había sido obligada a mantener silencio por las autoridades Chinas y había recibido varias amenazas de muerte, por lo cual se vio obligada a abandonar su país y refugiarse en Estados Unidos, en donde ha trabajado durante estos últimos meses junto a otros científicos compatriotas, que del mismo modo fueron exiliados de su nación.
Hace poco, Li-Meng había anunciado que presentaría pruebas para demostrar que el virus de la pandemia había sido creado en un laboratorio, las cuales ya han sido publicadas.
Este pasado lunes 14 de septiembre, se publicó un documento de 26 páginas en Zenodo bajo el titulo de “Características inusuales del genoma del SARS-CoV-2 que sugieren una sofisticada modificación en laboratorio en lugar de una evolución natural“, donde da información a detalle de los acontecimientos previos a la pandemia.
En uno de las páginas de dicho documento se establece lo siguiente:
“La proteína S habría sido manipulada artificialmente, después de lo cual el virus adquirió la capacidad de unirse a ACE2 e infectar a los seres humanos”, precisan para después añadir que “estas transformaciones han llevado a que el virus del SARS-CoV-2 se convierta eventualmente en un patógeno altamente transmisible, de aparición oculta, letal, sin secuelas claras y masivamente disruptivo”.
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En la misma línea, los autores prometen publicar una segunda parte dedicada a “desvelar la naturaleza espuria del coronavirus de murciélagos (Bat-CoV-RaTG13)”.
Además de esto se menciona que el virus “pudo ser completado en un periodo aproximado de seis meses”.
