Durante la conferencia mañanera, en la cual el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que a partir de los próximos días será dada a conocer la Guía Ética para la Transformación de México, se realizó un especial énfasis en que “quien nace pobre no debe de estar condenado a morir pobre”.
Mientras se explicaba el punto 11 de esta también llamada Constitución Moral, se explicó cómo fue que en México “no puede haber trato igual entre desiguales”, reiterando el compromiso del Gobierno de la 4T de estandarizar los niveles de todos los mexicanos.
“La buena ley tiene que moderar la opulencia y la indigencia, no puede haber trato igual entre desiguales. De la dignidad de origen se desprende que merecemos la igualdad, que la posición social y económica, el lugar de nacimiento y la residencia, el sexo, el genero, el nivel educativo, las posturas políticas y creencias religiosas no son un fundamento que justifique dar un trato desigual a una persona por parte de la sociedad o de las autoridades”, declaró uno de los miembros del gabinete presidencial que trabajó en la elaboración de este documento.
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“La desigualdad no es un hecho natural, ni parte de un orden divino, Quien nace pobre no debe de estar condenado a morir pobre. La desigualdad en cualquier rubro es producto de la injusticia y produce sufrimiento y es el deber de todos contribuir a una estabilidad nacional, procurando que se ayude a quienes se encuentren en desventaja, debilidad o riesgo o que sean discriminados en cualquier ámbito de la vida”, agregó.
“No se puede tratar igual a desiguales, el lema primero los pobres no significa a estos otorgar un privilegio superior a quienes no se encuentran en situación de pobreza”, precisaron las autoridades federales, sino que se esclareció que lo que se busca es auxiliar a todos aquellos que se encuentran reducidos en la pobreza con la finalidad de buscar una sociedad más juste e igualitaria.
Antes de finalizar se agregó que con este punto de la Guía Ética se busca erradicar el machismo y la violencia contra las mujeres, lo cual “no significa discriminar a los hombres sino procurar una plena igualdad en derecho y practica entre los derechos de todos los ciudadanos”.
