Pese a que la cantidad de casos positivos por COVID-19 en Monclova aumenta considerablemente día con día, el pasado sábado cientos de ciudadanos se dieron cita en la pulga de la ‘Lechería’.
Sin (aparentemente) temor a contagiarse, fue en la ya conocida pulga que los monclovenses se pasearon durante horas, e incluso algunos de ellos no utilizaban cubrebocas.
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Esto último no pareció alarmar a nadie, ni siquiera a los elementos de Protección Civil que se encontraban arriba de sus patrullas en las entradas y salidas del lugar, ya que no le hicieron ningún comentario a aquellos ciudadanos que no portaban su equipo de protección.
Sin importarles, chicos y grandes salieron a las calles poniendo en riesgo tanto su salud como la de su familia ya que las medidas de sanidad no estaban siendo aplicadas en este sitio.
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De acuerdo a las autoridades municipales, las pulgas de los diferentes puntos de la ciudad como la de la Miravalle y Praderas serían instaladas solamente ciertos días para de esta forma reducir la movilidad en este tipo de negocios.
Pese a esto, la estrategia parece no estar dando resultados ya que la irresponsabilidad tanto social como de parte de los vendedores continúa resaltando.
