Paisanos que ingresan por la Frontera para pasar la Semana Santa sufren doble acoso al llegar a México: de los policías que deberían protegerlos … y de integrantes del crimen organizado.
Elementos de la Policía Estatal de Tamaulipas que deberían escoltar a los connacionales de forma gratuita, les andan pidiendo una “propina” o cobrando una cuota de protección, de acuerdo con testimonios de los paisanos.
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A pesar de que la frontera de México hacia Estados Unidos está cerrada a viajes terrestres no esenciales por la pandemia del COVID-19, el flujo en sentido, continua.
Este miércoles arrancó el Programa Paisano, creado para facilitar trámites y proteger a los mexicanos que están llegando a sus lugares de origen formando caravanas de protección.
“Pero, al menos por parte de los elementos de la Policía Estatal, la seguridad no es gratuita”.
Los agentes ofrecen sus “servicios” de 20 dólares por cada vehículo de la caravana desde que los paisanos dejan el módulo de importación temporal vehicular (CIITEV), del Puente internacional 2 o Juárez-Lincoln, para llevarlos hasta la garita del kilómetro 26 de la autopista Nuevo Laredo-Monterrey.
El oficial) me dijo: ‘Si usted nos quiere dar una propina, es de su corazón y de su santa mano’”, narró un paisano que no quiso identificarse.
Extorsión de crimen organizado
Ávila denunció también que los paisanos están siendo víctimas de criminales armados que los interceptan para cobrarles una cuota de “protección” de hasta 500 dólares por auto y, si no la pagan, les roban pertenencias.
Los delincuentes también “cazan” a los paisanos al salir del CIITEV, a la altura del retén de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Allí traigo ya tres personas asaltadas y una persona a la que le golpearon la camioneta para obligarlo a pararse”, alertó Ávila.
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