Hablando de cuantiosas sumas de dinero, el cerebro humano deja de dimensionar después de llegar a cierto punto. Por ejemplo, cuando hablamos de fortunas de los hombres más ricos del mundo, tenemos que cuantificarlas en patrimonio neto, ya que, sus cantidades ascienden a cifras exorbitantes.
Es así, como llegamos a una cifra que rebasa a todas las anteriores, y esa la han pagado los ciudadanos norteamericanos con sudor y lágrimas.
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Aproximadamente un trillón, sí, un trillón de dólares ha sido tirado a la basura con la presente condición actual de Afganistán.
Ahí le va el porqué. En las administraciones de los últimos 20 años, comenzando en el 2001 en la administración de George Bush, se han destinado recursos federales para la militarización de las defensas armadas de Afganistán, con el objetivo de que puedan defender sus intereses de manos de, precisamente, grupos como los Talibanes.
En los pasados días, las fuerzas talibanes, entraron, por la puerta delantera, hacia la capital del país, tomando el poder del país entero.
Lo que indigna a los estadounidenses y la razón por la cual se afirma que se tiró todo ese dinero a la basura, es porque las fuerzas militares afganas, en lugar de pelear por su país, cedieron sus armas a cambio de un perdón canjeable por inmunidad ante las fuerzas de los talibanes.
Un trillón de dólares, para que las tropas se rindieran.
Si bien es lamentable, no se busca revictimizar al pueblo afgano, sin embargo, los hechos hablan fuerte y contundentemente. El contexto actual connota un panorama de violencia y probablemente se evitó un derramamiento de sangre el luchar por el pueblo afgano.
NRT México, Cobertura Total 360°
