Gerardo Meza Garanzuay fue sentenciado a 30 años de prisión sin ningún beneficio por el delito de homicidio y robo; el hombre ya había sido detenido antes de efectuar el asesinato, pues se le encontró haciendo un ritual en un cementerio con el cadáver de un perro al que abrió de extremo a extremo; pese a su detención pudo salir libre y en enero de este año asesinó a una persona.
Después de casi 9 meses de haber terminado con la vida de un hombre en una estación de gasolina, Gerardo Meza fue sentenciado a 30 años de prisión, pagará además una multa de 897 pesos y la reparación del daño en cantidad liquida; Meza cometió un brutal asesinato en una estación de servicio ubicada en los límites de Monclova y Frontera.
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Fue el pasado 21 de enero que un hombre llegó a una estación de servicio y atacó sin cesar al trabajador de una gasolinera, Gerardo sacó un martillo de entre sus pertenencias y comenzó a atacar al despachador de gasolina, identificado como Roberto; lamentablemente el hombre murió inmediatamente debido a la gravedad de los golpes mientras que Meza huyó con 2500 pesos de las ventas y otros 950 que sacó de la cartera del occiso.
El hecho quedó grabado en una cámara de seguridad y además una familia entera fue testigo de la sucedido y fueron quienes dieron aviso a las autoridades; el padre de familia intentó detener al agresor y entregarlo a las autoridades; tanto Guardia Nacional como la AIC arribaron al lugar y comenzaron con la búsqueda del asesino; fue detenido por la Policía Municipal de Frontera.
Redactora Digital: Nayely Mederes
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