Debido a las crisis bancarias que se viven actualmente en Estados Unidos con la quiebra y cierra de dos grandes bancos, el periodista Enrique Quintana explica que en este caso, el dicho mexicano que dice ‘al que con leche se quema, hasta al jocoque le sopla’ queda muy bien en esta problemática financiera.
“Tanto autoridades como expertos han señalado que la dimensión de los problemas que se han enfrentado es mucho menor a la que tuvimos en 2008. Y tienen razón (…) Pero, las decisiones que se han tomado en los últimos días parecieran decir otra cosa”.
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Asimismo, cabe mencionar que la base para que los sistemas bancarios colapsen es la incertidumbre, pues las personas y agentes económicos confían su dinero a estos bancos con la esperanza de que todo está correctamente controlado, es decir que si la gente ya no cree que su dinero no va a estar ahí o que si cobra su crédito no se lo van a pagar, es inevitable dirigirse a una crisis.
“Si esta certidumbre se pierde, no hay manera de evitar que haya una espiral de desconfianza que se puede convertir en crisis (…) En México, se dijo la semana pasada reiteradamente en la Convención Bancaria: tenemos una banca muy sólida. Sin embargo, ante la posibilidad de que hubiera una crisis financiera de grandes proporciones, sería imposible que no nos afectara pese a la solidez de nuestra banca”.
