Don Jesús es un zapatero monclovense, que desde hace 30 años brinda sus servicios en Monclova, sin embrago la lucha por ganarse la vida se ha convertido en un calvario desde el inicio de la contingencia sanitaria, a hora con la reapertura económica el panorama es desalentador.
Decretada la contingencia sanitaria tuvo que cerrar su local de la noche a la mañana, dejando muchos trabajos si poder entregar, dos meses de pues ha tenido que conseguir un local más económico para seguir trabajando, sin embargo el trabajo cada vez es menos.
Muchas personas que encargaron a den Jesús Hernández, reparación de calzado, no ha regresado a recogerlo, hasta zapatos de la mascota de acereros tiene en su haber.
En la esquina de Miguel Blanco y la calle Guerrero tiene don Jesús su local, donde ha podido subsistir gracias a que su trabajo lo antecede y los pocos clientes con los que aún cuenta, lo siguieron hasta este su nuevo local, local rodeado de locales vacíos, de quienes después de la pandemia ya no pudieron regresar.
