Esta tarde la Administradora de Servicios Generales (GSA) firmó finalmente el documento para dar por iniciada la transición de poderes en Estados Unidos.
La titular de la GSA, Emily Murphy, envió a Joe Biden una carta señalando que pondría a disposición de él “los recursos y servicios” con los que contará para “apoyar en la transición presidencial”.
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En la carta se indica que la deCISión fue tomada “debido a los recientes acontecimientos que involucraron demandas legales y certificación de resultados electorales”. Aludió, con ello, al fracaso de las demandas y recursos legales interpuestos por el saliente presidente Donald Trump para impedir la certificación de resultados en diversos estados que favorecen a Biden.
Dos estados clave, Georgia y Michigan, ya certificaron el triunfo del demócrata.
Así mismo se pondrán a disposición de Biden 6.3 millones de dólares para la transición.
Luego de darse a conocer la noticia, Trump agradeció a la encargada de la GSA por su firme dedicación y lealtad a los Estados Unidos, agregando que ha sido acosada, amenazada y abusada, y que no quiere ver que esto le ocurra a ella, a sus familiares o a los empLeados de la GSA.
Indicó que si bien “nuestro caso continúa CON FUERZA, mantendremos la pelea y creo que prevaleceremos”, “en aras de buscar el mejor interés de nuestro país, estoy recomendando que Emily y su equipo hagan lo que necesite hacerse con respecto a los protocolos iniciales, y he dicho a mi equipo que haga lo mismo”.
En la carta, Emily advierte que la GSA “no escoge ni certifica al ganador de una elección presidencial. El papel de la GSA es extremadamente estrecho: poner a disposición los recursos y servicios relacionados con una elección presidencial”.
Además de los 6.3 millones de dólares, se libera otro millón de dólares para sesiones de orientación y un directorio de la transición, indica el documento.
