La Cámara de Diputados aprobó la regulación del teletrabajo o home office, misma que se adicionará a la Ley Federal del Trabajo. Cerca de 440 diputados dieron luz verde a la iniciativa que será turnada por la Cámara de Senadora para que la analicen, aprueben y entre en vigor.
El home office se define, según el dictamen, es la realización de actividades renumeradas en sitios diferentes al establecimiento del empleador, esto quiere decir, cuando no es necesario la asistencia del empleado al centro laboral. A este concepto, se le agrega el uso de las tecnologías de la información y comunicación (TIC’s).
En este contexto, se considera home office cuando las personas emplean más del 40% de su tiempo laboral en un lugar diferente de su trabajo.
La iniciativa aprobada propone que los dueños o patrones tienen como obligación proporcionar equipo tecnológicos necesarios para llevar a cabo el trabajo desde casa. Así mismo, las empresas deberán pagar los costos de luz e internet empleados durante el teletrabajo.
Los patrones deberán respetar el horario laboral de sus empleados, permitiéndoles la desconexión, así como garantizar su derecho a la privacidad, además de proteger sus datos personales.
Los empleados se verán obligados en permanecer en buenas condiciones el equipo proporcionado por la empresa.
