Para Salvador Ramirez, taxista de Nueva Rosita , trabajar en pandemia ha sido difícil económicamente, por fortuna, dice su salud no se ha visto deteriorada porque toma sus precauciones; sabe que no está exento del contagio, pero al vacunarse se siente un poco más tranquilo y no por eso baja la guardia en su cuidado personal, porque así cuida también el de su familia.
“Afortunadamente no me he contagiado, ya estoy vacunado, tomo mis precauciones pero si da temor porque no sabes quién traiga el virus, hay que chambear” dijo.
Menciona que los taxistas, por tener contacto con la gente, se protege; él, por lo menos sanitiza su vehículo luego de que da un servicio, desinfecta el dinero con alcohol y se desinfecta las manos con gel antibacterial.
“Aquí la gente que no traiga cubreboca no sube, procuro tener aquí para darles uno, cada que bajan y mas cuando van al hospital de zona sanitizo mi unidad para no poner en riesgo al siguiente pasaje” comento.
