El periodista y analista Darío Celis en su columna de este viernes 23 de septiembre, señaló que el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, a solo siete días de que entregue el estado, ha comenzado a mover el sistema judicial federal y local con el fin de evitar la llegada de quien sería su sucesor Américo Villarreal. Destacando que aunque aún deberá mantener una discusión con la Sala Superior del Tribunal Electoral, para poder validar su victoria, y también para intentos de reales por liberarle órdenes de aprehensión.
Celis indicó que el magistrado Reyes Rodríguez, les ha planteado sus compañeros del pleno la posibilidad de que la elección sea anulada. Por lo que el equipo de Villarreal tiene confirmada una investigación sobre vínculos del crimen organizado en las pasadas elecciones, se ordenó que se pagara desde la presentación del presidente Rodríguez.
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“Del lado de la persecución judicial, documentos a los que tuvimos acceso revelan que apenas el 5 de septiembre surtió efectos una reconfiguración del sistema de justicia penal en Tamaulipas. Con él, los jueces de control adscritos a la primera región, con sede en la capital Ciudad Victoria, fueron removidos de su posición para ser enviados hasta la frontera, en específico a Matamoros”.
El periodista expuso que el ‘enroque’ de los juzgadores Rosa María Rodulfo y Christian Osiris Hernández, se negaron a la liberación de órdenes de aprehensión contra familiares y colaboradores de Américo, manifestaron que faltaban elementos para llevar a cabo tal petición. Dichas acciones fueron impulsadas desde el despacho del todavía mandatario Cabeza de Vaca.
