En el municipio de Chilchota, Michoacán, se reportó que habitantes enfurecidos comenzaron a quemar vehículos oficiales, debido a la falta de agua que se está presentando en su localidad desde hace varios días, por lo que muchas personas tomaron la decisión de acudir a la alcaldía municipal para dialogar con el alcalde, Miguel Ángel Ramos Alejo.
Sin embargo, al ser ignorados, los ciudadanos iniciaron a hacer destrozos en las oficinas y a incendiar vehículos oficiales, mientras que la policía municipal se encontraba resguardando al alcalde.
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Tras el ataque el gobierno municipal emitió un comunicado en el que se le informó a los habitantes de la localidad que se había llegado a un acuerdo en el que la bomba será restaurada el próximo 6 de noviembre, además de que el gobierno municipal lamento haber tomado dicha decisión luego de ‘las acciones vandálicas y violentas que un grupo de personas realizaron en las inmediaciones de presidencia municipal’.
