La difícil situación económica de Altos Hornos de México no ha repercutido en la fe de las familias de la región centro, lo que se está reforzando para que no pierdan la esperanza en salir adelante.
Jorge Salvador Guzmán, Vocero de la Diócesis de Saltillo comentó que ha observado angustia y tristeza en las familias de Monclova debido al temor que vendrá en el futuro para los obreros de Altos Hornos.
Agregó que muchos de ellos tuviera que buscar alternativas de salir fuera de la ciudad a buscar trabajo y otros el auto emplearse, dejando a sus familias y dejando de lado la iglesia católica.
“Nosotros hemos estado cercanos con apoyo moral, espiritual y material, ya que hemos estado presentes en las familias con la oración, así como también en lo emocional ya que esta problemática trajo mucho la depresión” afirmó.
Dijo que la pastoral social de Cáritas región siderúrgica del banco de alimentos y las familias han compartido despensas para quienes lo necesitan, sin embargo son limitados y lo mejor es que cuenten contrabajo y sueldo estable.
