Un grupo de activistas defensores de los derechos de los animales en Chi Meakh, Camboya lograron un a pequeña victoria en su búsqueda por lograr el final del comercio y consumo de la carne de perros al convencer a un matadero para que dejara de vender la carne de estos animales.
La pareja conformada por Buth Pith y Khath Hack decidieron cerrar su local esta semana, a pesar de que su negocio había estado operando desde el 2013, la decisión tomada llego luego de que los activistas lograran un acuerdo para brindarles un sustento, construyendo una tienda de conveniencia para que pudieran seguir manteniéndose.
Actualmente, los 15 perros serán que se encontraban encerrados en pequeñas jaulas, serán llevados a un refugio animal en la capital Nom Pen para revisar su salud y ser rehabilitados, por lo que muy pronto podrán ser puestos en adopción.
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A pesar de que en Camboya comer carne de perro es considerado como “atraer a la mala suerte” en los últimos años el consumo se ha incrementado exponencialmente.
Según la organización Four Paws International, con sede en Australia, y Animal Rescue de Camboya, se calcula que entre dos y tres millones de perros son sacrificados en Camboya.
Por su parte el encargado del lugar Buth Pit, señalo que había entrado en el negocio al no recibir suficientes ingresos cuando vendía agua dulce.
Al ver como otros recibían mayores ingresos al sacrificar a estos animales, decidió hacer lo mismo para mantener a su familia. Sin embargo, su esposa admitió que nunca se sintió cómoda con la idea de matar perros, pero tuvo que soportarlo para poder cuidar a sus dos hijos.
