En un principio se estimaba que solo 60 millones de personas serían afectadas, luego de perder sus empleos o por falta de ingresos debido a la crisis sanitaria. Sin embargo, esta situación está empeorando día con día debido a la pandemia del COVID-19.
David Malpass, presidente del Banco Mundial, advirtió que un gran parte de la población sería llevada a la ruina, asegurando que 100 millones de personas terminarían viviendo en la pobreza.
A pesar de las estimaciones, se cree que esta cantidad podría estar entre los 70 y 100, según detalló Malpass en una entrevista a la agencia AFP.
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También advirtió que si la crisis sanitaria se prolonga por más tiempo, esta cifra podría incrementar aún más. Sin embargo, buscan evitar que esto suceda, por lo cual el Banco Mundial se comprometió a dar 160 mil millones de dólares a 100 países hasta junio de 2021 para reducir el impacto económico.
De igual modo, Malpass considera que los acreedores podrán reducir el monto de la deuda de los países más pobres.
