El Comité Noruego del Nobel, que entrega cada año el prestigioso galardón del mismo nombre, con un valor estimado a un millón de euros, reconoció “los esfuerzos de la ONU por ayudar a mejorar las condiciones de paz en áreas afectadas por conflictos y por actuar como motor de los esfuerzos para prevenir el uso del hambre como un arma de guerra y conflicto”.
Berit Reiss-Andersen, presidenta del Comité Noruego del Nobel expresó que la decisión había sido tomada en parte debido al coronavirus, señalando que la pandemia ha aumentado aún más el número de víctimas del hambre en el mundo.
Hasta que no exista vacuna, “los alimentos son la mejor vacuna contra el caos”, según sus palabras. También mencionó que debido a la combinación entre los conflictos violentos y la pandemia, el hambre se ha disparado en países como Yemen, la República Democrática del Congo, Nigeria, Sudan del Sur y Burkina Faso.
Gracias a la capacidad impresionante para intensificar los esfuerzos del Programa Mundial de Alimentos (PMA)que se ha podido mejorar su situación.
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La presidenta Reiss, apunto que la cooperación multilateral es “absolutamente necesaria para combatir los retos globales”, y aprovecho para señalar uno de los mayores problemas actuales.
“Parece que el multilateralismo padece una falta de respeto últimamente, y el Comité Noruego del Nobel quiere enfatizar este aspecto”.
El PMA de la ONU es la mayor organización humanitaria de asistencia alimentaria, en 2019 brindó comida a cerca de 100 millones de personas de 88 países.
