Anna Cortez, una joven madre de 23 años de edad, se dio cuenta de un raro síntoma del coronavirus, poco después de ser diagnosticada, pues aparte de haber perdido los sentidos del gusto y el olfato, notó que la leche que le daba a su bebé de 4 meses de edad se tornaba de un color verde.
Esto lo explicó en una entrevista para el medio británico Mirror donde dio a conocer lo ocurrido sobre como le afectó la enfermedad.
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Tras acudir con un pediatra, el especialista le dijo que el cambio en el color de la leche podía deberse a los anticuerpos que luchaban con el virus y recomendó seguir alimentando a su hija con ella.
Durante la misma entrevista, dijo que la explicación dada la calmó y además mencionó que no hubo cambios en su dieta y que si su hija enfermara del estómago o si pescara un resfriado, la leche podría ayudarle.
Tras la entrevista, otras madres de familia contactaron con Anna para compartir sus experiencias.
Por otro lado, la Dra. Natalie Shenker, del Imperial Collage de Londres aseguró que las madres enfermas de coronavirus generan anticuerpos y que estos pasan a la leche en más de un 90 %.
