Este martes, el gobernador del estado de Texas Gregg Abbott, retiró la orden a nivel estatal del uso obligatorio del cubrebocas, sin embargo, la decisión ha sido duramente criticada, pues las autoridades sanitarias aseguran que no es un buen momento para realizar esta acción.
Además de esto, Abbott señaló que el próximo 10 de marzo todos los establecimientos habrían sin ningún tipo de restricción.
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“Demasiados texanos han sido apartados de oportunidades de empleo. Demasiados propietarios de pequeños negocios han sufrido para pagar sus cuentas. Esto tiene que acabar. Es hora de abrir Texas al 100 %”, dijo durante una rueda de prensa desde Lubbock.
El mandatario busca aprovechar que la vacunación en Estados Unidos avanza sin problemas, sin embargo, solicitó a la ciudadanía tener responsabilidad y seguir las indicaciones médicas.
“Ahora no es el momento de relajar las restricciones. Aunque hemos visto grandes reducciones en los casos y las admisiones hospitalarias en las pasadas seis semanas, estos declives se producen después del mayor pico que hayamos registrado en la pandemia”, dijo Rocelle Welansky, directora de los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades, en una rueda de prensa.
Hasta el momento, Texas es el tercer estado con mayor número de muertos de la pandemia, siendo esta cifra de 40 mil muertos, únicamente superado por los estados de Nueva York y California.
