Una madre familia de 48 años y su hijo de 24 años de edad, fueron asesinados de manera atroz por presuntos sicarios. El cuerpo de ambos familiares fueron abandonados en un tramo de la carretera Caborca-Sonoyta.
El triste hallazgo se dio durante la mañana del martes 04 de abril después de que hombres armados los secuestraron la noche del pasado lunes cuando se encontraban al interior de su vivienda en la colonia Desierto de Sonora.
Tanto la mujer como el joven presentaban huellas de violencia y heridas de balas. Los cuerpos fueron identificados como Idalia Sánchez y su hijo, Román Cortez.
Información extraoficial señala que los cadáveres fueron encontrados juntos con un narcomensaje dirigido a un grupo delictivo.
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