El pasado lunes 27 de junio se registró una de las mayores tragedias de migrantes en Estados Unidos, después de que encontraran a más de 60 migrantes hacinados al interior de la caja de un tráiler; la mayoría de ellos ya había perdido la vida, mientras que el resto estaba débil y con el cuerpo muy caliente.
Este miércoles se confirmó que el número de fallecidos incrementó a 53 respecto a los 46 encontrados el lunes.
Tras el reporte del hallazgo de un tráiler abandonado en San Antonio, así como de un cuerpo sin vida a un costado del vehículo de carga, los servicios de emergencia comenzaron a llegar al lugar para dar atención médica a los sobrevivientes; solo 16 lograron ser trasladados al hospital.
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“El olor para mí y para muchos de nosotros era ablandador de carne, porque de alguna manera se usó para enmascarar el olor de los humanos, o cosas así”, declaró el jefe del Departamento de Bomberos de San Antonio, Charles Hood.
Bryn Everitt, uno de los médicos que trabaja en el Departamento de Bomberos, describió la escena como algo terrible, destacando que los migrantes se estaban cocinando al interior de la caja.
Los migrantes podrían haber experimentado una temperatura de 65 grados Celsius debido a la inexistente ventilación al interior de la caja y las altas temperaturas que se sentían en el exterior.
Reportera Digital: Nayely Mederes
