Estas cámaras con visión nocturna e infrarroja detectan el movimiento en cualquier región por donde se tiene registro de cruce de migrantes. Originalmente son conocidas como torres de vigilancia autónoma, ellas son móviles por lo que su ubicación puede cambiar conforme a las necesidades de la Patrulla Fronteriza.
Aunque a simple vista pareciera que la frontera no es vigilada, son 290 torres a lo largo de toda la frontera y solo 15 en el sector El Paso, en los límites entre Texas y Nuevo México por donde cada vez aumentan más las cifras de cruces irregulares.
TE PUEDE INTERESAR: ‘La Reina del Pacífico’ a punto de obtener las regalías de ‘La Reina del Sur’
Estas torres aparte de captar el cruce de las personas, ayudan a salvar vidas cuando quedan atrapadas en el desierto, en ranchos o el río Bravo donde las condiciones son muy peligrosas.
En cada una de las torres hay un botón rojo para que un migrante en riesgo pueda solicitar rescate.
