La Mina 8 de la Unidad Mimosa de Altos Hornos de México se declaró este miércoles en riesgo de explosión ante lo que la empresa acerera solicitó el apoyo de Protección Civil Federal para atender la emergencia.
Lo anterior fue informado por AHMSA al Gobierno Federal mediante un escrito signado por el vocero de la siderúrgica Francisco Orduña Mangiola dirigido a la coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa.
En el mismo, explica que la mina ubicada en la Región Carbonífera de Coahuila aledaña a la ciudad de Sabinas y la más grande industrializada de carbón en la zona, fue bloqueada e impiden el ingreso de personal técnico.
Ante esto, señala el escrito, “no se atiende el ventilador que desaloja el metano existente en el manto, con el riesgo cierto de una acumulación de gas grisú y una explosión de consecuencias imprevisibles”.
El director de Comunicación Social y Relaciones Públicas de AHMSA argumenta la petición a la dependencia por tener relación con la función de prevenir situaciones que puedan afectar a grupos comunitarios.
Altos Hornos de México y su subsidiaria Minera del Norte enfrentan una compleja crisis operativa y financiera, situación que las mantiene fuera de actividad y les ha impedido cumplir con regularidad los pagos de derechos laborales al conjunto de sus 19 mil trabajadores.
Esta situación, explica la empresa a Protección Civil, ha sido aprovechada por activistas sin relación con AHMSA, para incentivar actos extremos de protesta del personal, los que conllevan altos daños a instalaciones clave y riesgos graves para los trabajadores y las comunidades circundantes.
Además del riesgo para la Mina 8, el vocero también expuso que en la localidad de Hércules, mantienen bloqueadas las instalaciones industriales y controlan el acceso a la población, interrumpiendo así el suministro eléctrico al sistema de bombeo, provocando la inundación de la mina con todo el equipamiento minero en su interior.
Mientras que en las siderúrgicas de Altos Hornos de México han bloqueado todos los pasos, impidiendo el ingreso tanto del personal de vigilancia como de los técnicos especializados en control de equipos y materiales sensibles, principalmente químicos, combustibles y residuos que requieren un manejo específico.
