La crueldad humana llegó a niveles trágicos nuevamente, a tan solo unas semanas de lo sucedido con el perrito que fue arrojado a un cazo con aceite hirviendo, un nuevo caso de tortura animal se dio justo con otro perro que de igual manera, fue quemado a propósito con aceite hirviendo.
En este caso fue un perro Husky de tan solo 10 meses de edad, habría ingresado a una fonda cuando los dueños del negocio le arrojaron el aceite hirviendo para correrlo del lugar, sin embargo esto le provocó quemaduras de consideración.
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El perro de nombre ‘Lobo’ cuenta con quemaduras de tercer grado y según relata la dueña, ‘Lobo’ está siendo atendido por un veterinario y a través de su cuenta de Facebook, expresa tristemente que cada vez que lo atienden, el perro llora por el dolor de las heridas.
“Llora en las noches porque no aguanta el dolor (…) Dudé mucho en subir esta publicación porque nuestra prioridad era curar a Lobo y que no muriera por las quemaduras tan graves que le ocasionaron esas personas inhumanas porque no encuentro con que otra palabra describirlas y que no se escuche grosero”.
